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En el estado de Texas, Estados Unidos, saltaron las alarmas. El precio de la electricidad se convirtió en una auténtica montaña rusa. La ola de frío que arrasó a EEUU hace algunas semanas, dejó temblando el mix de generación eléctrica, con muchos problemas de suministro y una demanda por las nubes. Resultado, que el precio de la electricidad marcado en ERCOT, el operador del sistema eléctrico de Texas, se ha disparado por encima de los 8.600 dólares/MWh.
El mercado eléctrico en Texas es un mercado denominado de solo de energía (only energy). Con lo que se genera es suficiente para cubrir la demanda, pero claro el estado se encontró ante un capítulo muy inusual, con temperaturas muy bajas de -20ºC. Lo que hizo que pudieran darse fallos en algunas instalaciones de generación o que no se pudiera suministrar electricidad.
El sistema energético de Texas cuenta con algunas características particulares que pudieron influir en la crisis vivida por la ola de frío.
A diferencia de otros estados, Texas tomó la decisión consciente de aislar su red eléctrica del resto del país.
Esto significa que cuando todo va bien, Texas no puede exportar energía sobrante a los estados vecinos. Pero en situaciones de necesidad tampoco la puede importar, por lo que fue imposible que la energía se redirigiera desde otros lugares cuando el sistema del estado falló.
Muchos consumidores tienen sus contratos con tarifas fijas con sus comercializadoras. Estas, por no tener más costes, prefieren no cubrirse y se arriesgan dejando en descubierto posibles ganancias o pérdidas según resulte el precio en el mercado. Normalmente las compañías no tienen estos problemas porque el precio no suele oscilar, pero ante esta inesperada oleada de frío, se podrían ir a la quiebra.
Varias comercializadoras se vieron en la obligación de enviar un email urgente a sus clientes. En ellos les solicitaban que por favor se fueran a otra comercializadora y si lo hacían durante el lunes 15 de febrero recibirían a cambio 150 dólares. Este es el caso de la comercializadora Infuse Energy. Pero hay más, en el caso de la compañía Volt regalaron 100 dólares a sus clientes por irse a otra compañía y en otro caso, una comercializadora ofreció a sus clientes entrar en un sorteo si reducía su consumo en un 10%. Sí cada día, desde ese lunes, bajaban un 10% su consumo, tenían una papeleta para el sorteo.
Las comercializadoras de electricidad que querían quitarse a sus clientes deprisa y corriendo es porque no estaban cubiertas. Compran energía a un precio futuro X y si se va muy por encima acarrean con los costes, pero si se va por debajo eso es lo que ganan.
Texas, el estado que más energía produce en EE.UU.
Texas es el centro neurálgico de la energía de Estados Unidos. Según datos federales, este estado del sur del país norteamericano genera casi el doble de energía que el estado de Florida, que es el siguiente.
Texas es el estado número uno tanto en crudo como en gas natural, según la Agencia de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés).
Acumuló un impactante 41% de la producción petrolera de Estados Unidos en 2019 y un cuarto de su producción de gas natural.
La energía eólica también está al alza en Texas, que produjo cerca del 28% de toda la electricidad creada por este medio en 2019, según la EIA.
Pero el problema es que Texas no es solo una superpotencia energética, sino que tiende a tener temperaturas superiores a la media y eso se traduce en que su infraestructura no está preparada para los temporales de frío.
Fuentes: El periódico de la energía, BBC News